1.- Empecemos por el principio
Uno de los trucos de los restaurantes para ofrecer una experiencia culinaria más completa, es presentar sus platillos por etapas. Las entradas o platillos al centro son una excelente práctica a imitar si buscas ahorrar en el costo de los cortes finos de carne. La idea es sencilla en realidad, lo único que necesitas hacer es preparar una botana como; las clásicas salchichas asadas, queso flameado, guacamoles, frijoles, tostadas o incluso totopos con salsas. El punto clave es escoger solo 1 o 2 y porcionarlos. Si se incluyeran todos sería desastroso para tu bolsillo.
2.- Come frutas y verduras
Una de las técnicas más efectivas para reducir el costo de una carne asada es simplemente preparar platillos que incluyan la mezcla de varios ingredientes. Por ejemplo las Fajitas o los Alambres, que llevan carne de res, cebolla, morrón y en ocasiones carne de cerdo. Al agregar más productos uno pensaría que se elevaría el costo. ¿Pero es así? Piénsalo de esta forma ¿Qué vale más un kilo de cebolla o kilo de carne? La carne verdad. Al incluir ingredientes como las verduras se reduce la cantidad de carne necesaria para el platillo.
3.- ¿Se va hacer o no se va hacer?
Uno de los grandes errores al organizar un evento “una carnita” es no estar seguro de cuantas personas van acudir en realidad. Esto provoca que la mayoría de las veces compres de más. En este sentido, lo que te recomendamos, es que en lugar de comprar cortes de más, compres complementos o botanas de más. Así si alguien cae de sorpresa, siempre tendrá que llevarse a la boca.
4.- La escalera de compras
¿Has notado que la res es más cara que el cerdo y el cerdo es más caro el pollo? Si, excelente. Cuando tengas pocos pesos en tu bolsillo y aun quieras celebrar sería bueno bajar un escalón de compra. ¿Qué significa eso? Bueno que si estás acostumbrado a asar Rib-Eye quizá sea bueno comprar unas chuletas de cerdo o porque no un pollo. Y de la misma forma cuando tu bolsillo este lleno podrás subir un escalón y comprar lo que te guste.
5.- El consejo peligroso
Este consejo cuesta mucho darlo, porque no muchos estarán de acuerdo con él. Pero puedo asegurarte que puede ayudarte a ahorrar en grande. Aquí va: ¿Has pensado en comprar menos cerveza?